LOS ÁNGELES, California.– El niño Gabriel Fernández de 8 años, murió el 24 de mayo de 2013 tras sufrir por meses maltartos y torturas propinados por su madre Pearl Fernández y la pareja de la mujer, Isauro Aguirrey, de acuerdo con registros de la Fiscalía del Condado de Los Ángeles.
EL caso de Gabriel Fernández es el estandarte para una ley que busca penalizar el maltrato infantil en California y su historia ha sido tan notoria que fue inmortalizada por la plataforma mundial Netflix como la muestra de los abusos que lo menores indefensos pueden llegar a sufrir de manos de las personas que se supone deberian amarlos y cuidarlos.
El niño murió el 24 de mayo de 2013 por constantes agresiones y abusos de su madre y el novio de esta. Y a pesar de que el menor estaba bajo los cuidados del Departamento de Niños y Familia y un grupo de trabajadores sociales estaban al tanto de la situación, no pudieron evitar el fatal desenlace.
La madre del niño, Pearl Fernández, de 32 años, y su exnovio, Isauro Aguirre, de 35, fueron enjuiciados y la fiscalía pidió la pena capital para ambos tras presentar las evidencias en el juicio que indicaron meses de palizas y torturas.
Fernández, ahora de de 39 años, fue sentenciada a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, mientras que su pareja, Isauro Aguirre, de 37 años, fue sentenciado a muerte por el juez de la Corte Superior del condado de Los Angeles, George Lomeli en 2019.
Luego de la sentencia, medios locales indicaron que el juez Lomeli calificó el crimen como «horrendo, inhumano y peor que el demonio». «Espero que piense sobre el dolor que causó a este niño y que te torture», dijo el magistryado. «Rara vez digo eso».
Los fiscales entablaron una denuncia contra los trabajadores sociales con el Departamento de Servicios para Niños y Familias del Condado de Los Ángeles que estaban involucrados en el caso, argumentando que no tomaron las medidas adecuadas para proteger al niño y falsificaron documentos relacionados con su caso, sin embargo el caso contra los trabajadores fueron desestimados.
Abuso mortal
La pareja abusó severamente de Gabriel durante meses previos a la muerte del niño el 24 de mayo de 2013, en el área de Palmdale, al norte de Los Ángeles. Gabriel fue golpeado frecuentemente por Aguirre porque creía que el niño era gay, según reportes.
Gabriel sufrió numerosas lesiones, incluyendo una fractura de cráneo, 12 costillas rotas y quemaduras, dijeron los fiscales. El niño también había sido obligado a comer heces de gato y dormía atado y amordazado dentro de un pequeño armario.
Fernández fue hallada culpable de torturas del cargo de asesinato en primer grado. En febrero de este año, la madre se declaró culpable de crimen en primer grado, indicó la oficina del fiscal.
Aguirre, un exguardia de seguridad, fue hallado culpable de homicidio en primer grado el pasado 15 de noviembre
El fatal 22 de mayo del 2013, las autoridades respondieron a una llamada en la que indicaban que el menor no respiraba. Cuando llegaron a asistirlo encontraron al pequeño Gabriel con el cráneo fracturado y demás signos de tortura, el menor fue llevado a un hospital local en donde dos días mas tarde, el 24 de mayo murió a causa de sus heridas.